EDUARDO MENDICUTTI

 Cronista ético de un mundo marginal

© José Carlos García Rodríguez






Dueño de una prosa malabarista y de una mordacidad singular, Mendicutti es para mí el único gran escritor de la presente narrativa hispánica que persevera en el humor, la galanura y el ingenio, tres señas de identidad españolas que producen repelús a los críticos solemnes y campanudos, a pesar de Cervantes, Quevedo, Valle-Inclán, Gómez de la Serna y Fernández Flores”. Quien esto escribe sobre Eduardo Mendicutti es el filólogo, historiador y escritor peruano Fernando Iwasaki en su libro El descubrimiento de España.
La obra de Eduardo Mendicutti, considerado como el autor más original de narrativa homosexual española, tiene como escenario el marginal mundo gay masculino y transexual en el que quedan reflejadas muchas de las vivencias personales del escritor. Y aunque no le ofende ser catalogado como un autor homosexual, sí le molesta el prejuicio que ello conlleva. Como dice Marco Kunz, “las obras de Mendicutti representan miradas a la vez críticas y jocosas sobre la sociedad española de la transición y la posmodernidad, vista desde la perspectiva marica”.


Eduardo Mendicutti Rodríguez, el mayor de ocho hermanos, nació en Sanlúcar de Barrameda el 24 de marzo de 1948. Sus primeros estudios los realizó en en el Colegio de La Salle antes de pasar al Instituto Padre Luis Coloma de Jerez de la Frontera donde cursó el Bachillerato. Tras realizar el servicio militar marchó a Madrid en 1972 donde estudió Periodismo. Más tarde ingresaría en la empresa Tecniberia para hacerse cargo de su departamento de publicaciones. 

Primera edición de "Una mala
noche la tiene cualquiera"
(Unali, 1982)
Muy pronto empieza Mendicutti a colaborar en diversos periódicos y en revistas, consiguiendo sus primeros premios literarios. En 1973 obtiene el premio Sésamo con Tatuaje, su primera novela, breve y experimental, que al final la censura recomendaría que no fuese publicada, permaneciendo inédita. Su segunda novela, Cenizas, galardonada en 1974 con el Premio Café Gijón, apareció, por entregas, en la revista Garbo

Hasta 1982 no aparece publicado el primer libro de Eduardo Mendicutti. Se trataba de Una mala noche la tiene cualquiera, novela ganadora del Premio Ciudad de Barbastro. La obra fue editada por Unali, una modesta editorial zaragozana que quebró poco tiempo después y únicamente pudo distribuir la novela de Mendicutti por unas pocas librerías aragonesas. Sin embargo, Una mala noche la tiene cualquiera, donde Mendicutti cuenta la historia de un travesti, “La Madelón”, la noche del 23-F, habría de renacer unos años después a raíz de que el escritor sanluqueño quedase finalista en 1987, con su novela Siete contra Georgia, del Premio La Sonrisa Vertical convocado por Tusquets Editores.



 Mendicutti con su paisano el profesor José Jurado
 Morales, autor del libro Una ética de la libertad.
La narrativa de Eduardo Mendicutti.


En la colección de bolsillo de Tusquets será repetidamente reeditada Una mala noche la tiene cualquiera. La novela, traducida al francés y al italiano, estará presente en numerosos cursos de universidades norteamericanas para ilustrar la transición política española. 

Convertido en autor de la prestigiosa editorial Tusquets, Eduardo Mendicutti publicará aquí sus siguientes obras que habrían de afianzar una brillante carrera literaria. Pronto, el escritor sanluqueño consolidaría un universo creativo en el que sobresalen especialmente la calidad de su prosa y la dimensión ética de sus personajes, construyendo una de las aportaciones más originales de la literatura homosexual española. 

A Una mala noche la tiene cualquiera y a Siete contra Georgia, seguirán Tiempos mejores (1989), El palomo cojo (1991, Finalista del Premio Nacional de Narrativa 1992), Última conversación (1991), Los novios búlgaros (1993), Yo no tengo la culpa de haber nacido tan sexy (1997), El beso del cosaco (2000), El ángel descuidado (Premio Andalucía de la Crítica 2002), Duelo en Marilyn City (2003), California (2005), Ganas de hablar (2008), Mae West y yo (2011), Otra vida para vivirla contigo (2013) y Furias divinas (2016).

Buena parte de la popularidad de que goza Eduardo Mendicutti se debe a la adaptación cinematográfica de dos de sus novelas, El palomo cojo, que dirige Jaime de Armiñán en 1995, y Los novios búlgaros (Eloy de la Iglesia, 2003), una película que consiguió una buena crítica y obtuvo el premio a la mejor película de temática gay en el Festival de Cine LGTB de Philadelphia (Estados Unidos).

Eduardo Mendicutti despliega en Sanlúcar de
Barrameda la bandera Arco Iris con motivo del
Día del Orgullo Gay.


De la presencia de Mendicutti en los medios de comunicación hemos de recordar su participación en las tertulias televisivas en horarios de máxima audiencia, así como sus colaboraciones en el diario El Mundo desde la fundación de este periódico por Pedro J. Ramírez. Especial notoriedad nacional llegó a alcanzar Mendicutti con las columnas de su personaje –su alter ego- la Susi. “Con la Susi o sin la Susi –escribió Paco Umbral- Mendicutti era y es un humorista nuevo, clásico, que cuida la escritura y sabe meter en una columna los temas de actualidad, la anécdota que está en la atmósfera, la observación peculiar y la palabra crítica que va a hacer daño a quien tiene que hacérselo.”

En el año 2012 el profesor de Filología de la Universidad de Cádiz, José Jurado Morales, publicó el libro titulado Una ética de la libertad. La narrativa de Eduardo Mendicutti, referencia pionera en la bibliografía sobre la obra del escritor sanluqueño. Según expone Jurado Morales, con su trabajo “matiza esa mirada empobrecedora que cataloga a Mendicutti como simple escritor de novelas gays y graciosas, por mucho que la consideración de la identidad sexual y la recurrencia al humor supongan dos claves esenciales de su ficción". Y para corroborar esta opinión, José Jurado Morales reúne en su libro diferentes trabajos sobre Eduardo Mendicutti elaborados por escritores de renombre y por numerosos estudiosos e investigadores de universidades extranjeras y españolas. 



El 6 de junio de 2012 Eduardo Mendicutti recibió en Palermo el premio “Nino Gennaro” que le fue concedido por el Sicilia Queer Film Festival en reconocimiento a la calidad de su obra literaria y a su compromiso con la defensa de los derechos del colectivo de gays, lesbianas, transexuales y bisexuales. El festival de cine gay de Sicilia instituyó el premio “Nino Gennaro” para honrar la memoria de este intelectual y activista siciliano nacido en Corleone en el año 1948 y muerto a causa del sida en Palermo en 1995, cuya homosexualidad e iniciativas causaron una gran hostilidad hacia su persona tanto por parte de los partidos de izquierda como de derechas y hasta en la mafia. Durante el festival se proyectó la película Los novios búlgaros, la adaptación cinematográfica por Eloy de la Iglesia de la novela de Mendicutti del mismo título.

En Malandar, la última novela de Eduardo Mendicutti, aparecida a principios de 2018, su autor construye una historia a base de lo que él define como "recuerdos autobiográficos sin melancolía". El escritor sanluqueño nos habla en esta nueva novela de un particular triángulo amoroso compuesto por una mujer y dos hombres, desde su infancia hasta la vejez. En esta obra, como en toda la producción literaria de Eduardo Mendicutti, la homosexualidad vuelve a estar presente, al igual que el humor y la sátira de un autor que, como dice Juan Ángel Juristo, “siempre se ha reído hasta de su sombra”.