JOSÉ LUIS REPETTO BETES

 EL PRIMER DEÁN DE LA CATEDRAL DE JEREZ

© José Carlos García Rodríguez








El pasado año 2019 la Fiesta de la Vendimia de Jerez estuvo dedicada a Sanlúcar, siendo este el motivo por el que el Consejo Regulador tuvo la deferencia de invitarme a ofrecer una conferencia en su Bodega de San Ginés. Bajo el título “Jerez y Sanlúcar, una historia compartida”, desarrollé mi exposición en la que no faltaron las obligadas y justas referencias a tantos “sanluqueños en Jerez”, a esos paisanos que han desarrollado sus ocupaciones con especial dedicación y brillantez en la ciudad hermana. Me referí a Manuel María González Ángel, fundador de las bodegas González Byass; a Julio González Hontoria, bajo cuyo mandato como alcalde de Jerez se realizaron muchas e importantes obras públicas, entre ellas el parque que lleva su nombre; al prestigioso doctor José Luis Ruiz Badanelli; a Benito Pérez Rodríguez, “jurispoeta” para el periodista Manolo Liaño, apelativo que habría de acompañar a Benito de por vida; al poeta, abogado y agricultor Toto León Manjón... y, claro está, a una personalidad fundamental para conocer bien y entender aún mejor el último medio siglo de la historia religiosa de Jerez: el presbítero y Prelado de Honor de Su Santidad José Luis Repetto Betes.

Nacido en Sanlúcar el 8 de agosto de 1936, José Luis Repetto fue el segundo entre los tres hijos habidos en el matrimonio formado por Félix Repetto y Carmen Betes. En 1946, tras realizar sus primeros estudios en el colegio Sagrado Corazón de Jesús que los Hermanos de las Escuelas Cristianas (La Salle) tenían establecido en la calle San Agustín del Barrio Alto sanluqueño, José Luis ingresa en el Seminario Menor de donde pasaría, cinco años más tarde, al Seminario Metropolitano de Sevilla. Aunque entonces la edad señalada para la ordenación de sacercedotes eran los veinticuatro años, José Luis Repetto, por concesión especial del papa Juan XXIII, a petición del cardenal arzobispo de Sevilla José María Bueno Monreal, es ordenado a los 22 años en la Catedral de la capital andaluza el día 21 de junio de 1959.

Repetto Betes es enviado a Carmona como coadjutor en la parroquia de San Pedro, donde habría de permanecer durante algo más de dos años. En este tiempo llega a conocer en profundidad la figura del por entonces Beato Juan Grande cuya vida estuvo tan íntimamente relacionada con la ciudad de Jerez donde falleció en 1600. Curiosamente, el carmonense Juan Grande que tan profunda huella deja en el espíritu del joven sacerdote sanluqueño había sido bautizado en aquella misma parroquia de San Pedro donde Repetto ejerció su primer destino pastoral.


El trabajo ministerial de José Luis Repetto Betes en Jerez se inicia en 1962 donde es destinado como cura propio en la parroquia de Santa Ana. Allí habría de permanecer durante once años, hasta que en julio de 1973 accede a la Colegial de Jerez después de aprobar las oposiciones a abad que realiza en la Capilla de la Virgen de la Antigua de la Catedral de Sevilla, obteniendo las máximas calificaciones posibles.  

En estos años ya empieza a ser conocida la altura intelectual que José Luis Repetto va mostrando en sus escritos. Su atención preferente como escritor es la hagiografía, cultivada de forma muy especial en el caso del Beato Juan Grande -y después San Juan Gande- cuyo patronazgo de la Diócesis de Asidonia-Jerez y su posterior canonización habrían de recibir por parte del presbítero sanluqueño un impulso fundamental.


A la figura de Juan Grande dedica José Luis Repetto los librosEl beato Juan Grande. Su vida y su obra”, “Un Grande de Dios”, “Jerez tiene un santo”, “San Juan Grande apóstol de la misericordia”, “El hermano Juan Pecador” y algunos otros. El 2 de junio de 1996 es la fecha fijada para la canonización de Juan Grande cuya beatificación había tenido lugar nada menos que en 1853. La Orden Hospitalaria, agradecida por el compromiso y los desvelos de Repetto por llevar a buen fin este asunto, le invita al solemne acto que se celebra en la Plaza de San Pedro, siendo uno de los veinte sacerdotes que concelebraron la misa junto al papa Juan Pablo II.

Aparte de sus libros referidos a San Juan Grande, la inmensa obra hagiográfica de Repetto Betes comprende una larga nómina de títulos. Ente ellos, “Andalucía, tierra de santos”, “Mil años de santidad seglar en la Iglesia. Santos y beatos del segundo milenio”, “Biografía y escritos de María Antonia de Jesús Tirado. Fundadora del beaterio Jerezano del Santísimo Sacramento (1740-1810)”, “Todos los Santos. Santos y beatos del Martirologio Romano”, “Santoral del clero secular del siglo XIII al siglo XX”, “El pedagogo orante. La vida y la obra de San Juan Bautista de la Salle” y “Santoral español”. Académico de la de San Dionisio de Jerez, de la de Santa Isabel de Hungría de Sevilla y antiguo director del Centro de Estudios Jerezanos, José Luis Repetto, también dedicado a la investigación histórica, es autor de otras muchas obras que casi siempre tienen a Jerez como argumento principal.


Al entrar en la Colegial con el cargo de presidente del Cabildo y párroco de El Salvador, Repetto comprueba la situación de abandono y las malas condiciones en que se encuentra el templo, elaborándose a indicación suya un proyecto de acondicionamento y restauración en cuya ejecución estuvieron de acuerdo las instituciones implicadas. La Colegial, remozada, se erigiría en Catedral del Salvador al crearse la Diócesis de Asidonia-Jerez el 3 de marzo de 1980 por bula papal de Juan Pablo II a petición del cardenal Bueno Monreal. José Luis Repetto, revestido con el título de monseñor desde el Vaticano, fue el primer deán de la Catedral jerezana además de canónigo lectoral, responsabilidad que habría de mantener hasta el año 2010 en que pasa a ser párroco de San Dionisio Areopagita donde habría de oficiar su última misa en septiembre de 2014.


El 2 de diciembre de 2010 la entonces alcaldesa jerezana Pilar Sánchez hacía entrega a José Luis Repetto del título de Hijo Adoptivo de Jerez. Durante el acto, un pleno solemne y extraordinario que tuvo como marco el precioso Cabildo Antiguo, se dió lectura a la relación de méritos del homenajeado, destacándose la profundísima relación de Repetto con Jerez desde que arribase a la ciudad, casi cincuenta años antes, para hacerse cargo de la parroquia de Santa Ana.

En septiembre de 2018, un año antes de cumplirse los sesenta años de su ordenación sacerdotal, José Luis Repetto, quien vive jubilado en su Jerez de adopción dedicado a la oración, a la lectura y a la escritura, presentó en el Palacio de Bertemati, sede del Obispado de Asidonia-Jerez, su libro “Los Santos Padres. Del siglo II al IX”, enésima obra que sumaba a su extensa producción bibliográfica a la que, sin duda, no habrá de tardar en añadir nuevos trabajos.